Para manejar automóviles en la vía pública tenemos algunas obligaciones que cumplir, como obtener la licencia de conducir y renovarla. Son situaciones que requieren aprobación teórica y práctica.

Pero… ¿quién me otorga la licencia para conducir equipos de trabajo? No existe esa instancia formal, sin embargo, quienes quieren obtener buenos resultados en las pymes, sean estos dueños, socios, gerentes o jefes, deben “aprobar” en la práctica que son realmente buenos líderes de sus equipos de trabajo.

Todos mis clientes, graduados o no, no han tenido preparación formal en conducción de equipos de trabajo. Sus pymes las fundaron a partir de un gran conocimiento en algún área de negocio y tuvieron que conducir personal a medida que evolucionaban sus empresas. Varios han sido exitosos, otros realmente padecen este proceso de crecimiento.

Lo que aquí describo es lo que he observado y trabajado en mi cotidiana tarea como consultor, al escuchar malestares por el comportamiento y malos resultados del personal subalterno.

1.- Asignar una actividad

Carlos, puede venir un segundo? Escucho que el ejecutivo llama al empleado de mantenimiento a través del interno, mientras se desarrollaba una de las primeras reuniones de asesoramiento.

Aparece por la puerta un empleado de mediana edad, con su mameluco usado pero prolijo y se dispone a escuchar a su jefe.

Vas hasta el pañol, te buscas un tubo de bajo consumo y cuando termino acá me cambiás el de esta oficina que está empezando a fallar. Si no hay en stock, hablá con Andrea para que te de la plata, te corrés hasta la ferretería y ocúpate de cambiarlo cuando termine esta reunión. Gracias.

Carlos, el empleado de mantenimiento, asiente con la cabeza y se retira.

Le pregunté a mi cliente sobre Carlos, me dijo que hace unos años trabaja para ellos y que tiene buena opinión sobre su desempeño.

Quedé algo sorprendido por esta asignación de tarea. ¿Acaso Carlos necesitaba tanta información para resolver? ¿Este ejecutivo necesita dar tantas instrucciones dentro de su empresa a sus subalternos?

Hay unas pocas claves necesarias utilizar para asignar o delegar una tarea:

  1. Se debe asignar la tarea a una personas que esté capacitada para hacerla, sino el jefe comenzó mal.
  2. Debe explicarse el propósito de la tarea y verificar que se haya entendido. Esto último se puede hacer de dos maneras, pidiendo que explique con sus palabras lo que entendió o bien directamente solicitando al subalterno que describa cómo lo va a hacer.
  3. No asignar tiempos a la tarea, pedirle al empleado que estime el tiempo que le va a llevar (¿días? ¿semanas?…)
  4. Al asignar una tarea, uno delega la ejecución de la misma pero no la responsabilidad. Por lo tanto, no se debe dejar de controlar si verdaderamente se cumplió.

Claro que hay tareas muy complejas y otras muy sencillas. En el caso del empleado de mantenimiento, a mi entender hubiera bastado con: –Carlos, ¿ puede solucionar el problema de iluminación de esta oficina? Gracias.

2. Formar personal

¿Gasto o inversión? Cuando fui gerente de ventas de una pyme de servicios de capacitación a empresas, utilizaba una frase que me parecía muy apropiada: Si usted cree que la capacitación es cara, pruebe con la ignorancia.

Claro, que una pyme debe pasar cualquier propuesta de servicios por el filtro de su presupuesto, analizar los beneficios y justificar la inversión.

Me sigue sorprendiendo en mí día a día, que son pocas las empresas que han contratado entrenamiento formal en ventas para sus comerciales, confían en la transmisión oral de experiencias y de sus procedimientos internos. También están los que ven a la capacitación como un premio y no como una apuesta a una mejora del rendimiento. Hay capacitaciones que mejorarán de forma temprana el rendimiento del personal, por ejemplo al instruirse en una herramienta o una nueva tecnología. Pero están también más las de largo plazo, como las denominadas blandas, por ejemplo: el liderazgo, la innovación, la diversidad, el manejo del tiempo, entre otras.

Quienes tienen personal a cargo deben asumir la responsabilidad de planificar la capacitación de sus subalternos. Les recomiendo volver a leer mi artículo: Al contratar capacitación.

3. Contratar personal

Considero que uno de los costos ocultos (ocultos por poco tiempo) más grandes que sufren las pymes es el de incorporar recursos que no rinden, que no están a la altura del puesto al que fueron contratados.

Muchas empresas me han pedio asistencia para incorporar vendedores. Observo que se sienten más seguros contando con alguien que está capacitado para darles un diagnóstico del recurso. También están los que me convocan para decidir sumar un gerente o un cuadro medio.

Siempre les recomiendo en la primera etapa de la búsqueda, justificar claramente el ingreso de un nuevo recurso, luego hacer un listado exhaustivo de sus tareas y responsabilidades. Aquí hay que hacer un análisis de lo coherente que resultan estos tópicos, y finalmente describir el perfil buscado para atender esas tareas.

Muchos errores parten de incorporar familiares o personas cercanas o recomendadas por conocidos. En estos casos se valoriza, en mi opinión en demasía, la confianza por sobre la idoneidad para el puesto.

La asistencia de externos experimentados en el proceso de búsqueda y selección puede resultar una opción muy apropiada.

4. Motivar, premiar

¿Cuántas veces usted, su jefe, o un colega, realizó, o fue testigo, de una felicitación a un empleado en público (o medio en privado)? ¿Piensa usted que la única recompensa que se espera es dinero? Pues, no lo es.

Son pocas las pymes con las que he trabajado que el personal que conduce se busca el tiempo para felicitar a un subalterno. Les cuesta entender que es muy importante que lo hagan, algunos me han confesado que temen que le pidan aumento de sueldo.

Quienes conducen personal, tienen entre sus atribuciones motivar al personal. Claro que puede haber un estímulo en dinero, sobre todo cuando se alcanzan metas de productividad, calidad, innovación, etc. El buen clima laboral es muy importante para alcanzar objetivos y desafíos, y esto se logra, entre otras acciones con la motivación del personal.

A quienes estén interesados en mis consejos acerca de premios y estímulos para vendedores les recomiendo volver a leer mi artículo: Comisiones, premios e incentivos.

5. Comunicar

Suelo preguntar a directores y gerentes de pymes cuál es su rutina de reuniones con sus empleados y me contestan, en la mayoría de los casos, de la siguiente manera: –Mirá Simón, somos una empresa chica, nos cruzamos a diario y conversamos lo que necesitamos en el día a día.

Una de las cinco tareas más importantes al tener personal a cargo es planificar, y para ello se necesita reflexionar, lo cual se logra mejor junto con los involucrados. Suelo recomendar establecer semanal, quincenal o tal vez mensual reuniones por área (verticales), y también entre cuadros medios con la dirección (más horizontal). Fijar el día es muy apropiado, por ejemplo todos los lunes a la mañana o bien el segundo martes de cada mes, etc. Lo difícil, según mi experiencia, es sostener la regularidad de los encuentros, y los que suelen comenzar a cancelar o posponer las reuniones pactadas son los mismos gerentes que las propusieron. ¿Falta de fe en la herramienta?

Durante las reuniones, la confección de una breve minuta de las decisiones y compromisos es elemental, y ayuda enormemente a la comunicación.

Conclusión

No es fácil conducir personal, es probable que usted no haya tenido formación para ello y tal vez ni siquiera estaba en sus planes tener que conducir. En principio me gustaría que me contara si utiliza, o bien, qué resultados le han dado los pasos que le propuse en el Error 1, o sea, la asignación de actividades. Delegar bien no solo es uno más de los atributos de un gerente o jefe, es el corazón del liderazgo, algo así como obtener la licencia de conducir.


Simón Lutvak

Dedicado al desarrollo, ajuste y fortalecimiento de la estrategia del negocio y al diseño e implementación de las mejores prácticas comerciales. Cuenta con más de 25 años dedicados a PYMEs de la Argentina y la región.

4 comentarios

Gabriel · 26 marzo, 2025 a las 11:42

Hola Simón, como siempre, muy bueno tu mensaje. Creo que muchas veces quien solicita la tarea tiene miedo que no lo hagan como él lo desea porque cree que esa es la mejor forma. Tal vez si hubiese cambiado los porta tubos por lámparas led no tendría más los problemas de desgaste del tubo pero no es lo que él quería que era simplemente cambiar el tubo. Creo que fuimos muchos quienes nos vimos en el trabajo de enseñar bajo nuestra experiencia y creo que no es bueno, porque los resultados de las acciones están relacionadas con nuestra personalidad por lo que no a todos nos dará el mismo resultado. Creo que las reuniones son excelentes para un equipo de trabajo que trabajan juntos, pero son difíciles para un equipo de vendedores que trabajan por separados en distintas provincias, existe mucho celo entre ellos.
Abrazo!!!

    Simón Lutvak · 26 marzo, 2025 a las 17:08

    Gracias Gabriel por sumar tu experiencia. Quien conduce personal tiene que buscar la manera que sus subalternos desarrollen su potencial. Un desafío que no es fácil lograr. Capacitando, probando sus responsabilidades o presentándole desafíos, son algunas de las herramientas que se deben utilizar. No hay una sola manera de hacer bien las cosas.

    Leandro · 28 marzo, 2025 a las 09:23

    Hola Simón, muy interesante la nota.

    Está la frase «El Alumno le enseña al maestro». La misma la llevo a tu nota y que mejor gestión de un Gerente o Jefe, que tú Subalternos, rindan, que logren sus objetivos, que sepan mostrar sus resultados, que puedan levantar la mano y se sientan acompañados, «GERENCIAR».

    Estoy convencido que en cualquier Pyme que se Trabaje en Equipo, logrará mejores resultados. El trabajo en equipo en el mejor mecanismo para llegar a los objetivos, y para eso coincido en la importancia que tienen las reuniones bien planificadas.
    Cuando crees que hacer reuniones es una perdida de tiempo, aún falta mucho por aprender.

    Cómo siempre Simón, excelente nota y muy amplia.

    Fuerte abrazo

      Simón Lutvak · 28 marzo, 2025 a las 09:47

      Gracias Leandro por sumarte con ideas. Existe un estudio que determina que el promedio de capacidades y rendimiento de un equipo de trabajo está ligado por una constante respecto de las capacidades y rendimiento de su jefe. Por lo tanto si hacés crecer al equipo, sube su jefe, y si hacés crecer a su jefe, sube su equipo. Volviendo al artículo, si mejorás tu desempeño como líder de tu grupo de trabajo también estás «subiendo» a tus subalternos.

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